Dolores Redondo, Premio Planeta 2016 y una de las escritoras más exitosas de los últimos años por su Trilogía del Baztán, explicaba hace unos años en una entrevista que “regresar a este valle es como venir a casa. A mis amigos escritores les digo que es un caramelo por muchas razones. El enclave natural es poderosísimo, precioso; e históricamente tiene una gran importancia”.

Un rincón del Valle de Baztán, Navarra

Sus sentimientos hacia estos paisajes los compartía en este vídeo, en el que no dejaba pasar su exuberante naturaleza, el significado del río, su herencia mitológica, la arquitectura popular, la estampa de sus iglesias, sus tradiciones y hasta la gastronomía local. Todo ello, tan presente en los tres libros de su saga: “El guardián invisible”, “Legado en los huesos” y “Ofrenda a la tormenta”. Tal es el vínculo de la autora con este valle, que desde su propia página web promueve visitas guiadas por los lugares que recorre Amaia Salazar, personaje principal de las obras.

No es que Dolores Redondo haya puesto en el mapa al Valle de Baztán. Desde hace muchos años es uno de los reclamos para el visitante que acude a Navarra y ha sido una comarca pionera en el desarrollo del turismo rural. Pero está claro que, últimamente, está más de moda que nunca. Y, ¿qué tendrán estos parajes dignos de convertirse en protagonistas literarios?

Aquí os dejamos 7 excelentes razones por las que te enamorarás de este precioso valle:

1. Un patrimonio natural del que te enamorarás a primera vista.

Todo el Valle de Baztán es un escenario para ser contemplado, da igual hacia donde mires. Verdes montañas redondeadas y bosques de cuento en los que escuchar el rumor de sus regatas.

Señorío de Bértiz, Valle de Baztán

Una visita imprescindible es el Parque Natural del Señorío de Bertiz, con más de 2.000 hectáreas de frondosa vegetación, en el que se puede pasear por un increíble jardín botánico que acoge más de 120 especies de árboles y arbustos diferentes.

El Mirador de Ziga, que nos ofrece una de las mejores panorámicas del valle, es una parada obligada para hacerse una foto.

2. Rutas, excursiones y rincones en los que perderse.

El Valle de Baztán, el municipio más extenso de Navarra, resulta una delicia para los amantes del senderismo. Los recorridos montañeros y senderos balizados son interminables. Muchos de ellos, como la Cascada de Xorroxin o Infernuko Errota, en el que podrás visitar un antiguo molino restaurado, son ideales para realizar con niños.

3. Un Camino de Santiago más íntimo.

El Camino de Santiago de Baztán, que une Bayona con Pamplona, es una preciosa y poco conocida ruta jacobea, que puede plantearse como una entrada alternativa a la tradicional, por Roncesvalles. Quienes la realizan aseguran que el paisaje y sus pueblos embrujan al peregrino. ¡Muchos regresan al tiempo como turistas!

Amaiur/Maya, Valle de Baztán

4. Piedras que hablan a cada paso.

Por estos lares, tierra de indianos y caseríos de piedra imponentes, la riqueza histórica y cultural asaltan al viajero en cada esquina.

Elizondo, capital del valle, destaca por sus casas señoriales, su ayuntamiento del siglo XVIII y la iglesia de Santiago. Se pueden descubrir magníficos ejemplos de palacios de cabo de armería en Irurita, Arraioz, Almandoz, Gartzain o Arizkun y los restos del castillo de Amaiur, último bastión frente a Castilla tras la conquista de Navarra.

Y si queremos viajar al pasado, Baztan conserva más de 600 megalitos repartidos en quince zonas. Dos recursos muy recomendables son el Museo Etnográfico de Baztan, en Elizondo, y el Parque-Museo Santxotena de Arizkun.

5. Actividades para todos los gustos.

Uno de los grandes alicientes del Valle de Baztán es que, a la gran oferta de alojamientos rurales (entre ellos, nuestras casas rurales de agroturismo en esta zona), se suma un sinfín de alternativas de ocio.

Propuestas de deporte-aventura, paseos y rutas a caballo, visitas a queserías, observación de aves… Si vais en familia, no podéis perderos Bertiz Abentura Park, un parque en el que practicar arborismo, paintball y poner a prueba emociones fuertes en sus circuitos de tirolinas.

Queso y yougur ecológico de la quesería Jauregia, valle de Baztán

6. En esta tierra, se come más que bien.

Buenas carnes, asados, platos de caza, quesos de medalla, derivados del pato, sidras artesanales y dulces para relamerse como la cuajada o un buen trozo de urrakin egina. Es mejor que traigas una maleta vacía, porque querrás llevarte de todo un poco.

7. Como decía Dolores Redondo, te sentirás como en casa.

Llevamos muchos años atendiendo a los visitantes, modernizando nuestros alojamientos de agroturismo, pero sin perder el respeto por esa arquitectura popular que nos hace únicos.

Si buscas valles tranquilos, que combinen  con armonía naturaleza y tradición, has dado en el clavo.

El Valle de Baztán es el lugar que andabas buscando.